Adiós

Un poco aprendí a amar como tú, sin pensar en mañana, sólo hoy, sólo ahora, sin ataduras, engaños, reclamos o recompensas.

Siempre que me hablaban de ese amor pensaba en ti. Eras un gran ejemplo.

Pero me faltó mucho por aprender de ti, una vida más, dos... tres. Y es que puedo llegar a ser muy tonta cuando se trata de dejar de ser humana y ser más perro.

Por fin entiendo lo que sentías cuando salíamos y te quedabas en casa esperando nuestro regreso, o cómo te alegrabas a pesar de que no volvía en años. Pero ahora quien se quedó fui yo.

Me quedo con tu imagen corriendo por el jardín.

Me quedo con tu recuerdo, con lágrimas, con alegrías, tristezas. Me quedo aquí, esperando impaciente a volverte a encontrar en esta vida, en otra, en otra galaxia o universo, ojalá en uno donde decir adiós no duela.

Adiós. Te dejo ir.
Gracias.

Comentarios

Entradas populares